La recuperación debe formar parte de tu plan de entrenamiento. Cuando nos exigimos por encima de nuestras posibilidades solo nos estamos dirigiendo hacia un camino: al de las lesiones. Conoce 6 alertas de tu cuerpo que te indican que debes descansar.
Cuándo introducir periodos de recuperación
Dependiendo de tu nivel, objetivos y condición física, deberás descansar más o menos días a la semana. Lo que queda claro es que todo deportista necesita un periodo de recuperación.
Incluso, algunas semanas serán menos intensas para permitir que nuestro cuerpo descanse correctamente de cargas anteriores.
Estas son las 6 principales alertas que tu cuerpo muestra para avisarte de que debes recuperar:
No se produce progresión
Si notas que estás sufriendo un periodo de estancamiento, es probable que se deba a un sobreentrenamiento.
Dolor muscular prolongado por falta de recuperación
Durante la práctica deportiva es habitual sufrir algunas molestias leves en sesiones muy intensas. No obstante, cuando este dolor o molestia se prolonga durante un tiempo debemos prestar atención.
No podemos normalizar el hecho de que antes de entrenar tengamos que tomar algún analgésico o aplicar alguna crema para aliviar el dolor.
Dificultad para conciliar el sueño
El insomnio es otra de las posibles razones que indican que debes establecer un periodo de recuperación. Esta situación se debe a una sobreexcitación del sistema nervioso simpático que pone en alerta a nuestro cuerpo. De este modo, nos impide relajarnos.
Enfermedades o resfriados frecuentes
El exceso de ejercicio provoca un debilitamiento del sistema inmunitario, lo que da pie a la aparición de gripes, infecciones o resfriados.
Aumento de peso
Quizá te parezca algo contradictorio. Lo normal es que cuando hacemos ejercicio tendamos a perder peso, pero ¿por qué el sobreentrenamiento puede hacer que engordes?
La explicación está relacionada con el cortisol y con el sometimiento a un estrés continuo del organismo. El cuerpo genera mayor cantidad de esta hormona y, al mismo tiempo, se produce un aumento de la glucosa en sangre.
El páncreas segrega insulina para reducir los niveles de glucosa, los cuales resultan insuficientes por la continua segregación de cortisol. Como resultado de todo este proceso, la glucosa termina convirtiéndose en grasa.
Aparición de lesiones de forma continua: uno de los signos más frecuentes ante la falta de recuperación
Si no descansamos, no permitimos a nuestro cuerpo regenerarse y asimilar los entrenamientos.
El sobreentrenamiento causa dolores musculares y articulares dando pie a una serie de lesiones como rotura de fibras, fascitis plantar, tendinopatías, etc.
No olvides incluir la recuperación como una sesión más en tu plan de entrenamiento y presta atención a estas 6 alertas que te indican que debes descansar.
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