Una manera de descansar de la rutina de ejercicios habitual es el ejercicio acuático. ¿Sabías que hacer ejercicio en la piscina puede proporcionarte un excelente entrenamiento para todo el cuerpo?
Se puede practicar independientemente de la estación. En los meses de verano, es más refrescante hacer ejercicio en el agua o en invierno estar en una piscina cubierta climatizada. Y, además, ejercitarás todo el cuerpo.
Ventajas de los ejercicios en piscina
Como sabes, el agua ofrece una resistencia más pesada que el aire, por lo que los ejercicios en el agua pueden suponerte un mayor desafío. Asimismo, el ejercicio acuático puede involucrar más a los músculos, así como realizar ejercicio vascular y al mismo tiempo aumentar la fuerza, la resistencia y la flexibilidad.
La flotabilidad del agua también proporciona un apoyo adicional para sus músculos y articulaciones. Esto permite ejercitarse más intensamente, pero con menos impacto en el cuerpo que en tierra. Es muy útil para aquellas personas que tienen enfermedades de las articulaciones, como osteoartitris y artritis reumatoide.
Al mismo tiempo es una forma más suave de ejercicio para mujeres embarazadas y personas que tienen osteoporosis, fibromialgia, problemas de equilibrio y lesiones articulares.
Tipos de equipamientos que se pueden utilizar
Si diriges un centro en el que se ofrecen clases acuáticas, los usuarios agradecerán que les proporciones algunos equipamientos, como cintas de correr, elípticas y bicicletas. Aunque también se les puede ofrecer pesas de muñeca o tobillo, mancuernas de espuma, palas de mano o guantes de resistencia, un cinturón de flotabilidad o un kickboard. Este último es muy útil para mantenerse a flote mientras se realizan ejercicios para el torso y la parte inferior del cuerpo.
Recomendaciones
Dentro de la piscina se pueden realizar algunos ejercicios que se pueden hacer en la piscina como caminar sobre el agua, elevación de brazos o de piernas. En cualquier caso, es conveniente tener en cuenta algunas recomendaciones a los usuarios:
- Puede sudar más de lo que cree cuando hace ejercicio en el agua, así que es conveniente mantenerse hidratado bebiendo muchos líquidos antes y después de hacer ejercicio.
- Aquellas personas que no sean buenas nadadoras, es aconsejable que empleen un cinturón de flotabilidad o un chaleco de flotación.
- No se recomienda hacer ejercicio en una piscina que se calienta a más 32 ° C.
- Parar de hacer ejercicio si la persona se siente aturdida o mareada, es incapaz de respirar, siente nauseas, se encuentra débil o tiene dolor o presión en el pecho o en la parte superior del cuerpo.
- En cualquier caso, es aconsejable ponerse en manos de un profesional antes de iniciar cualquier tipo de nueva rutina de ejercicios o si tiene algún problema de salud. Esto evitará problemas a posteriori.
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