Con el invierno, la idea de quedarte una hora más en la cama es mucho más atractiva que hacer una rutina de ejercicios o ir al gimnasio, ¿verdad?. De sobra es sabido que es importante mantenerse en forma para estar saludable. Esto incluye a los meses más fríos. Pero la cuestión es: ¿cómo puedes mantenerte motivado para lograr tus objetivos de salud y estado físico cuando el invierno lo hace tan complicado? Aquí encontrarás algunos consejos que pueden ayudarte seguir haciendo algún tipo de actividad física.
Mantén tu rutina
Si durante el verano y el otoño has tenido una rutina saludable, ¿por qué romper todo el trabajo duro durante el invierno? En primavera será mucho más complicado recuperar el hábito de hacer algo de deporte. Si bien es más difícil levantarse de la cama a las mañanas, ya que afuera está aún oscuro, te sentirás mejor al hacerlo. Recuerda que para lucir ese cuerpo en verano, hay que trabajarlo durante el invierno.
Prepara todo por la noche anterior
Independientemente de que entrenes temprano en la mañana, durante la pausa del almuerzo o por la noche, la preparación es la clave. Ten todo tu equipo de entrenamiento listo para llevar en tu bolsa para el día siguiente. Esto evitará las excusas de ‘olvidar’ el equipo de entrenamiento y, como consecuencia, saltártelo. Asimismo, es aconsejable preparar tu ropa de trabajo, tu desayuno y cualquier otra cosa que pueda ralentizarte por la mañana. Ahora, ¿qué te detiene?
Contrata a un entrenador personal
Si aún no está trabajando con un entrenador personal, este puede ser el momento de invertir en uno. Ser responsable y asistir a las sesiones garantizará el hacer ejercicio. La mayoría de las veces, también habrás pagado la sesión por adelantado; por lo que vas a dejar que se desperdicie el dinero. Contratar a un entrenador personal durante el invierno es una de las formas más fáciles de asegurarse de estar motivado cuando la idea de quedarse en la cama parece muy deseable.
Encuentra un compañero de entrenamiento
Si los servicios no te puedes permitir un entrenador personal, entonces la mejor opción es contratar a un compañero de entrenamiento. Entrenar con amigos es siempre una buena manera no solo de divertirse y mantenerse en forma, sino también de ser responsable.
No conviertas un mal día en una mala semana
Durante tu viaje de acondicionamiento físico, siempre habrá algunos baches en el camino. Si eliges saltarte el gimnasio en una mañana particularmente helada, no te castigues por ello. Mientras te levantes al día siguiente y te pongas a trabajar, ¡el día que te saltes no importará! Si continúas entrenando, a largo plazo obtendrás los resultados deseados.
¡Solo haz algo!
Si la idea de una sesión de gimnasia de una hora parece demasiado difícil, simplemente dite a ti mismo que irás al gimnasio durante 15 minutos. Una vez que te esfuerces por cambiarte, ir al gimnasio y comiences a mover tu cuerpo, poco a poco irás aumentando el tiempo que esté en el gimnasio.
Es importante tener en cuenta que para ser una mejor versión de uno mismo, se necesita determinación, compromiso y responsabilidad; ¿te sientes capaz? Si deseas motivar a otros a sacar una mejor versión de sí mismos, ¿por qué no consideras convertirte en un entrenador profesional? Si te apasiona el deporte, ¿por qué no lo conviertes en tu carrera profesional?
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