Conoce nuestra rutina sana para niños. La alimentación y la actividad física de los más pequeños de la casa es algo que preocupa mucho, por ello, te dejamos varios consejos que harán que se sumen a un estilo de vida más sano y equilibrado.
6 claves para mantener una rutina sana para niños
Selecciona un buen desayuno
No hay nada mejor para comenzar el día que un buen desayuno. Si escogemos alimentos inadecuados, repercutirá negativamente en su rendimiento físico e intelectual.
Elabora un plato completo compuesto por cereales, frutas y lácteos.
Planifica con tiempo el tentempié del recreo
Un fallo muy común es que el niño no tome nada a media mañana, por lo que su próxima comida sería el almuerzo.
Para mantener los niveles de glucosa estables aconsejamos realizar un segundo desayuno durante el recreo.
Los alimentos que debemos proporcionar variarán si este periodo de descanso está cercano al almuerzo o no, puesto que tampoco es recomendable que el niño llegue totalmente saciado a la hora de la comida. Por ejemplo, se puede optar por una pieza de fruta o un pequeño bocadillo.
Los alimentos de la merienda dependen de las actividades extraescolares
Los días en los que tengan actividades deportivas requerirán una merienda más consistente. Sin embargo, durante aquellos otros en los que no hay actividad física, las necesidades energéticas serán menores.
Recuerda que una merienda planificada correctamente es la clave principal para evitar problemas durante la cena.
Cena temprano: esencial para una rutina sana
No cabe duda de que los niños, especialmente en periodo lectivo, han de acostarse temprano para rendir al máximo.
Las cenas han de ser ligeras y a una hora temprana. Selecciona alimentos que no resulten indigestos para que no dificulten el sueño.
Evita el sedentarismo
Por supuesto, debemos evitar el sedentarismo entre los más pequeños. Para inculcar el deporte a tu hijo no hay nada mejor que servirle de ejemplo.
Haz que el niño pruebe diferentes actividades para que descubra aquella que más le guste. Intenta motivarle y presentarle la realización de ejercicio como algo positivo y divertido.
Presta atención al consumo de agua
El consumo de agua en los más pequeños es fundamental, al igual que ocurre con los adultos. Recomendamos que la ingesta de refrescos azucarados se produzca de modo ocasional.
Por otro lado, en caso de proporcionar al niño un zumo, lo ideal es que sea elaborado a partir de frutas naturales.
Estas han sido nuestras claves para mantener una rutina sana para niños. No olvides que si introducimos estos hábitos desde que son pequeños crecerán de forma más segura y no les costará llevar a cabo este estilo de vida en un futuro.
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