Cada vez es más habitual ver estrellas del deporte ligadas a actos benéficos. Así, ex futbolistas importantes como David Beckham y Didier Drogba, han estado involucrados en empresas involucradas con acciones en África, mientras que el boxeador Tyson Fury prometió recientemente donar lo recaudado con su importante bolsa de la lucha a las personas sin hogar.
Otros, como la atleta Dame Kelly Holmes, han preferido establecer su propia fundación o fondo para ayudar a causas elegidas, como la inclusión social o la alfabetización. De hecho, cada vez es más habitual encontrar una celebridad deportiva, como el futbolista Cristiano Ronaldo o la tenista Serena Williams, que no haya invertido parte de sus recursos económicos en nobles causas.
Ronaldo ha ayudado a las víctimas del terremoto, mientras que Selena ha ayudado a establecer centros educativos en el este de África, entre otras acciones desinteresadas. Por otro lado, el futbolista del Liverpol, James Milner, creó su propia fundación benéfica en la temporada 2011-12, y desde entonces ha donado alrededor de medio millón de libras a causas benéficas, como la organización de leucemia Bloodwise, NSPCC y Help For Heroes.
¿Qué les motiva a realizar esta inversión desinteresada?
Ahora la cuestión es ¿por qué personas con este perfil tan alto económica y deportivamente hablando se involucran en iniciativas altruistas? Según Jen Shang, una experta psicóloga de la Universidad de Plymouth (Reino Unido) puede haber diversas razones muy complejas.
Al comenzar en el mundo deportivo puede que los deportistas buscaran recompensas como el dinero o el honor de los premios. Pero con el tiempo buscan otras motivaciones. Al menos es lo que afirma Shang.
Bienestar
Contribuir a una acción desinteresada produce un bienestar no solo a la persona a la que se le está ayudando, sino también en la persona que da.
Compromiso y entrega
Si algo aprenden los deportistas cuando es el compromiso a desarrollar su carrera deportiva entregándose al cien por cien. Muchos de ellos reciben llamadas para contribuir en causas benéficas, algunos participan y otros crean sus propias fundaciones.
No obstante optar por la fundación benéfica no siempre es fácil. Muchos jugadores no caen en la cuenta de que implica fideicomisarios, pautas de la compañía, pautas de la Comisión de Caridad, marcos financieros y legales. En definitiva, una gestión apropiada.
También cabe tener en cuenta que algunas de estas organizaciones cuentan con patrocinadores que están altamente comprometidos con la causa. Algunos ejemplos son: la Fundación Russell Martin dirigida por el jugador de Walsall y ex internacional de Escocia, y la Fundación Jason Roberts, dirigida por la ex internacional de Granada y la estrella de West Brom, Portsmouth y Blackburn.
Sensibilización
Asimismo, buscan la sensibilización de la sociedad para recaudar fondos para investigación, etc.
Como puedes ver los deportistas se han convertido en embajadores solidarios. No obstante, tanto para realizar donaciones como para llevar a cabo tu propia fundación solidaria es necesario contar con una base formativa e incluso para gestionar cualquier tipo de actividad o evento deportivo.
No hay comentarios